Me chiflan las portadas de las novelas pulp. Es decir, de los folletines de kiosko.

Aunque el look de esta portada sea retro, se trata de una edición de 2012 que recupera una novela perdida del autor de «El cartero siempre llama dos veces». La ilustración es obra de Michael Koelsch. Vía Hardcasecrime.

De 1951. El autor de esta portada es Bob Stanley. Encontrada vía a la imprescindible cuenta de twitter @pulplibrarian.

Martinis y asesinato: el clásico plan para un viernes. Ni idea de quién es el autor. Cuenta Pulp Covers que había una portada alternativa.

Otra de Henry Kane. La portada es de Victor Kalin. Encontrada en Pinterest.

O lo que vendría a ser «Otra copichuela«. De 1958. El autor de la portada es Sam Peffer (Peff).

Que os tengo dicho que bebáis responsablemente, hombre, que mira qué pasa luego. No sé de quién es la portada, pero aquí una sinopsis.

Nunca me he tomado un martini en bikini, y sospecho que en 1965, de cuando es esta novelilla, fue el último momento bueno para hacerlo, antes de que llegaran los Tequila sunrises y Harveys wallbangers de épocas posteriores. Tsk.

Esta semana ha muerto Francisco González Ledesma, quien, además de abogado, periodista, escritor de novela negra y guionista de cómic fue uno de los padres de la literatura pulp patria. In memoriam.